sábado, 8 de diciembre de 2012

Filosofía con humor


A causa del agolpamiento en lo referente a los exámenes, no hemos podido publicar entradas de forma más asidua. Para tomar algo de aire y descansar del tiempo de estudio, pondremos a continuación fragmentos humorísticos, que muchos de vosotros entenderéis. Como veréis, la filosofía y el humor andan de la mano y no por ello, se debe valorar de manera distinta a la filosofía. Sin más preludio, os brindamos esta nueva forma de entretenimiento.


¿Por qué el pollo cruzó el camino?

Platón: Para el mayor Bien.
Karl Marx: Era una inevitabilidad histórica.
Jacques Derrida: Diferentes discursos se podrían afirmar y se podrían descubrir del acto del pollo que cruza el camino, y cada interpretación es igualmente válida pues el intento autorial no se puede discernir, porque el estructuralismo está muerto.
Timothy Leary: Porque ese es el único tipo de viaje que el establishment le permitiría tomar.
Nietzsche: Porque el camino es el puente para llegar a ser ''Súper Pollo''.
Carl Jung: La confluencia de acontecimientos en la gestalt cultural ha hecho necesario que los caminos de los pollos individuales se crucen en esta juntura histórica, y por lo tanto, se hayan sincronizado en el ser.
Jean-Paul Sartre: Para actuar en la buena fe y ser consecuente consigo mismo, el pollo encontró necesario cruzar el camino.
Albert Camus: Porque es absurdo.
Descartes: Porque si cruza el camino ergo existe.
Ludwig Wiigenstein: La posibilidad de ''travesía'' fue codificada en los objetos ''pollo'' y ''camino'', y las circunstancias permitieron la actualización de esta ocurrencia potencial.
Albert Einstein: Si el pollo cruzó el camino o el camino cruzó al pollo depende de su marco de la referencia.
Aristóteles: Para actualizar su potencial.
Epicuro: Por el placer de cruzarlo.
David Hume: Por la fuerza de la costumbre y del hábito.
Pirrón el escéptico: ¿Qué camino?
Zenón de Elea: Al intentar probarlo podría nunca alcanzar el otro lado.
Heráclito: Porque necesita moverse.
Parménides: Es un pollo único y no puede moverse, él cubre todo el camino.
Immanuel Kant: Porque la razón le indica que ese es el fin último de su voluntad.


¿Qué silla?

Un profesor de filosofía entra en clase para hacer el examen final a sus alumnos. Poniendo la silla encima de la mesa dice a la clase: “usando cualquier cosa aplicable que hayan aprendido durante este curso, demuéstrenme que esta silla no existe” Todos los alumnos se ponen a la tarea, utilizando sus lápices y gomas de borrar, aventurándose en argumentos para probar que la silla no existe. Pero un alumno, después de escribir rápidamente su respuesta entrega su examen ante el asombro de sus compañeros. Cuando pasan unos días y entregan las notas finales, ante la estupefacción de todos, el alumno que entregó su examen en 30 segundos obtiene la mejor calificación. Su respuesta fue: “¿Qué silla?”

Cuatro amigos

Un ingeniero, un físico experimental, un físico teórico y un filósofo están paseando en las montañas de Escocia. Cuando llegan a lo alto de la cima, ven en otra cima una oveja negra. El ingeniero dice: “está visto que las ovejas en Escocia son negras”. “Mejor sería decir que ‘algunas’ ovejas escocesas son negras”, responde el físico experimental. El físico teórico piensa un momento y exclama: “es más correcto decir que al menos una de las ovejas escocesas es negra”. Por fin el filósofo responde: “al menos por uno de sus lados”.


Utopía 

“La Utopía está en el horizonte.
Pero si me acerco dos pasos,
ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos y el horizonte
se desplaza diez pasos más allá.
¿Entonces, para qué sirve la utopía?
Pues sirve para eso,
¡Sirve para caminar!”